Esto de la reposteria va a hacer que me guste el invierno, y es que salvo que el fondant, sobre todo el sodifer, que es el que a mi me gusta, se pone duro como una piedra y que salen musculitos en los dedos y que la mantequilla hay que sacarla 10 horas antes, todo lo demás son ventajas.
Y es que el calor puede ablandarlo todo lo que se eche, le pongas diques o le pongas lo que quieras, no se me ocurre otra cosa que echarle un poquito de yeso alrededor de la tarta para que no se deforme. Eso me pasó con el segundo piso de la tarta, mira que era chiquito, pero más lata dio. Tanto que tras acostarme a la 1.30 h. a las 6.30 ya estaba levantada para hacer otro bizcocho rápidamente, ir a trabajar, volver y montar de nuevo la tarta…pero bueno mereció la pena y no me quedé con esa sensación de “que churro he entregado” lo podia haber repetido…
La receta del bizcocho y del relleno es del libro de “las recetas de la pasteleria de Hummingbird” ; quien esté a dieta que no lo compre porque está de muerte todo lo que hay. Son recetas fáciles y con ingredientes que puedes tener en casa y algunas están de morirse. Esa era este bizcocho de chocolate, relleno de chocolate…mira que a mi particularmente esta mezcla me parece excesiva pero está en su punto…me ha gustado vamos!! y creo que a los papás de Paula y sus invitados tambien.
Esta vez he utilizado el pastillaje de Squire kitchen, que no lo conocia. Me parece comodisimo porque como está en polvo, coges solo la cantidad que necesitas y no tienes que hacer el preparado de pastillaje que siempre sobra. El unico inconveniente es que viene solo en formato de 250 gr. y la verdad, una vez lo haces da para poco.